Desmantelan red de tráfico de cocaína en Miami

Miami, FL.- Una investigación que comenzó en Doral en abril ayudó a los agentes federales a destapar una organización de narcotráfico que operaba en el sur de la Florida y que buscaba importar cocaína de Panamá a Miami, de acuerdo con documentos de la Corte Federal.

La investigación llevó a la identificación de cuatro sospechosos — José Francisco Soto, Rafael Castro, Roney Wendell Oliver y George Henry Eckardt. Tres, que han sido detenidos e instruídos de cargos, se han declarado inocentes y ahora todos están a la espera de ser enjuiciados. Eckardt bien podría aún estar prófugo.

El caso es sólo el más reciente de una serie de arrestos por las autoridades federales de miembros de redes de tráfico de drogas que generalmente involucran a tres o cuatro personas que actúan como distribuidores que por lo general son descubiertos después de que un informante proporciona pistas a las autoridades federales.

Eso fue lo que ocurrió en este caso.

El 30 de abril, una fuente confidencial escuchó a dos hombres en la ciudad de Doral decir que podían “enviar” cocaína desde Panamá a través del Puerto de Miami, de acuerdo con una denuncia penal presentada por un agente especial de la Agencia de Luchas contras las Drogas (DEA).

Las discusiones posteriores que se centraron sobre la importación ilícita de cientos de kilos de cocaína se llevaron a cabo en un restaurante en Sunrise en las que la fuente confidencial actuó como agente de confianza, aún cuando estaba trabajando para la DEA en una operación encubierta. La denuncia penal identifica al informante solo como CS, iniciales en inglés de confidential source o fuente confidencial.

Para junio, según la denuncia penal, las negociaciones habían avanzado al punto de que se habían iniciado las discusiones sobre un posible precio para la compra de la cocaína: cerca de $2 millones por 80 kilos de cocaína.

Con el tiempo, dice la denuncia, los acusados ​​acordaron comprar la cocaína. Bajo las condiciones del acuerdo, según la denuncia penal, los acusados ​​acordaron el pago a la fuente confidencial de un depósito inicial de $500,000.

Una vez que se pagó el depósito inicial el resto se pagaría en cuotas hasta llegar a un total de $2 millones.

“El dinero estaba empacado en paquetes, algunos de los cuales estaban envueltos en papel de celofán verde”, dice la denuncia penal. “El CS inspeccionó visualmente el dinero, pero no lo contó”.Los acusados ​​acordaron entregar los primeros $500,000 en efectivo en una oficina en Miami que los agentes de la DEA tenían ya bajo vigilancia, dice la denuncia penal.

Después de que el informante vio el dinero, se excusó de la reunión, salió de la oficina en Miami y llamó a la DEA, de acuerdo con la denuncia penal.

En ese momento, los agentes de la DEA y otras fuerzas del orden entraron en la oficina y recibieron la autorización de los que estaban ahí para registrar el local, según la denuncia.

Dos de los acusados, Castro y Oliver, fueron detenidos en la oficina en Miami el 23 de junio. Soto fue detenido a principios de agosto, pero no está claro si Eckardt se encuentra bajo custodia.

Fuente: http://www.elnuevoherald.com/noticias/sur-de-la-florida/article95991657.html

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